17 DE OCTUBRE DE 1945

Un hito histórico

Se conmemoraron semanas atrás 71 años de un acontecimiento decisivo para la historia nacional. El 17 de octubre de 1945 se produce un fenómeno cuya huella sería determinante en la segunda mitad del siglo XX y hasta nuestros días: la irrupción de las masas peronistas, de los obreros pobres migrados del campo y la ciudad, exigiendo la liberación de Juan Domingo Perón. Allí nacería un nuevo movimiento de masas en la Argentina de carácter nacional y popular.

El vínculo del entonces teniente coronel Perón con los trabajadores se forja durante su desempeño -desde el 27 de octubre de 1943- en la Secretaria de Trabajo y Previsión Social. Empuja desde allí un conjunto de reivindicaciones que entroncan con las luchas obreras de entonces, encabezadas fundamentalmente por los comunistas, anarquistas y socialistas. En el caso de nuestro Partido, dirigíamos sindicatos como el de la Carne, el Textil y el de la Construcción, entre otros.

Perón impulsa la creación de los tribunales de trabajo; se sanciona el Decreto 33.302/43 extendiendo a todos los trabajadores la indemnización por despido; más de dos millones de personas son beneficiadas con un haber jubilatorio; se sanciona el Estatuto del Peón de Campo y el Estatuto del Periodista; se crea el Hospital Policlínico para trabajadores ferroviarios; se crean las escuelas técnicas dirigidas a obreros. Se logra, desde la Secretaría de Trabajo, derogar el decreto-ley sancionado en los primeros días del gobierno militar que reglamentaba a las organizaciones sindicales.

Los sindicatos experimentan un período de gran crecimiento y comienzan a afiliar a los nuevos trabajadores identificados con Perón, los que estaban migrando masivamente desde el interior del país a la ciudad, los llamados “morochos”, “grasas” y “cabecitas negras” por las clases medias y altas.

En 1944 Perón es designado Ministro de Guerra y meses después Vicepresidente de la Nación del General Farrel. Atrás habían quedado las presidencias de los generales Arturo Rawson y Pedro Ramírez. El vínculo de Perón con la masa de obreros era cada día más resistido por el establishment empresarial y los sectores conservadores de las Fuerzas Armadas. Para estos, Perón significaba un peligro para el país, tal como lo anunciaba la portada del Diario Crítica.

El 12 de octubre el General Farrel ordena la detención de Perón, quien es trasladado a la cañonera Independencia y luego a la Isla Martín García. En la madrugada del 17 de octubre comienza una movilización de los trabajadores de los barrios populares de la Capital Federal así como de las zonas industriales de sus alrededores. Fue muy importante el contingente de obreros que sale de Berisso, donde había importantes frigoríficos. Los trabajadores no ingresaban a las fábricas y talleres e iban recorriendo los establecimientos vecinos incitando a abandonarlos para luego marchar coreando consignas en favor de Perón. A las 23:10 Perón sale al balcón de la Casa Rosada y se dirige a una Plaza de Mayo que se transformaría en una postal histórica. Se iniciaba una nueva e inédita etapa en la vida política nacional.