El pasado 30 de noviembre realizamos el segundo plenario metropolitano de secundarios del año. El mismo contó con la participación de camaradas de Vicente López, San Isidro, San Martin, Gral. Rodríguez, Avellaneda, Quilmes, Esteban Echeverría y CABA.
La reunión tuvo como finalidad poner en común y balancear lo realizado este año, atravesado por la campaña electoral que nos llevó a la victoria el pasado 27 de octubre, y proyectar nuestro rol militante en la etapa que se abre a partir del próximo 10 de diciembre.
Como frente estudiantil secundario del PCCE pusimos todo nuestro esfuerzo en organizar a los convencidos para convencer a los indecisos: en la calle y en los colegios secundarios, disputando voto a voto y sumando fiscales. Para nosotros, militantes comunistas y del campo popular, ser parte de esa victoria constituye un gran orgullo y una gran responsabilidad de estar a la altura de los desafíos que se vienen.
De esta forma, compartimos el saldo de crecimiento en cantidad y calidad que obtuvimos al calor de la campaña electoral y los nuevos desafíos que se nos presentan. Así, contamos con una gran cantidad de compañeros y compañeras que se han acercado al Partido en este proceso y con nuevos horizontes de construcción dentro de las escuelas donde ya estábamos y en otras nuevas.
Para la etapa que se viene nos planteamos como tarea fundamental reforzar la concentración política en el frente estudiantil secundario, siguiendo nuestra metodología leninista de acción concentrada en frentes de masas concretos. Allí estará orientada nuestra actividad: en disputar el sentido político del movimiento estudiantil secundario en cada lugar donde estemos.
Tras un rico y detallado intercambio acerca de la situación en cada distrito, nos propusimos, hacia el mes de febrero, realizar un nuevo campamento de formación del frente estudiantil secundario del Partido.
Finalmente partimos de nuestro local hacia la Plaza de Mayo, donde culminaba por esas horas la Marcha de la Resistencia de las Madres de Plaza, llenos de espíritu militante y entusiasmo por lo que se viene.