DE MENOR A MAYOR, DE LA DISPERSIÓN A LA UNIDAD

La única salida es la lucha

El pueblo argentino está sufriendo un ajuste brutal que se expresa en la pérdida del poder adquisitivo por los aumentos de servicios energéticos, comunicaciones, medicamentos, alimentos, alquileres, etc. A esto se le suma una recesión histórica, con una economía quebrada que produce despidos en diversos rubros privados, más las definiciones políticas de cesantear trabajadores del sector público y cerrar empresas estatales. 

La pobreza crece en la misma proporción que crecen las ganancias multimillonarias para los sectores concentrados de la economía, lo que representa una fenomenal transferencia de riquezas que van de los bolsillos de las y los trabajadores al sector empresarial nacional y extranjero. El gobierno de Milei y sus aliados del PRO, UCR y sectores del peronismo neoliberal están jugando con fuego, generando con sus políticas económicas las condiciones objetivas para una resistencia unificada por parte de los sectores populares. 

Continúan las luchas en defensa de las universidades y la educación pública a lo largo y ancho de todo el país, con movilizaciones, clases públicas y tomas de facultades. En las diversas asambleas interclaustros se votaron las resoluciones que construyen un plan de lucha contra el ajuste del gobierno de Milei y sus cómplices. Recordemos que el pasado martes 22 de octubre se realizaron más de 100 clases públicas en Plaza de Mayo, la jornada incluyó también abucheos al Presidente cuando se asomó, mientras festejaba su cumpleaños, junto a parte de su gabinete al balcón de Casa Rosada. 

La indignación crece y se extiende a diversos sectores donde el ajuste al presupuesto educativo, inédito desde la vuelta de la democracia, afecta las bases sociales de nuestra patria. Cada vez son más los argentinos que pasan hambre y cuando salen a la calle son reprimidos con palos, bala de goma y gases. La insensibilidad de la política del gobierno se expresa en golpizas, allanamientos y detenciones ilegales que nos recuerdan a los momentos más oscuros del país. En Santa Fe fueron detenidos docentes y trabajadores estatales nucleados en AMSAFE y CTA por manifestarse contra la reforma previsional frente a la Casa Gris. Esto produjo una serie de medidas de lucha como paro y movilizaciones que permitieron la liberación de los compañeros detenidos. 

Por otro lado, la Mesa Nacional del Transporte reunió a los principales dirigentes del sector: Hugo y Pablo Moyano (Camioneros), Omar Maturano (La Fraternidad), Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento), Juan Pablo Brey (Aeronavegantes) y Pablo Biró (Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas), para ratificar el paro del día miércoles 30 de octubre, marcando la disconformidad con las políticas de ajuste de Javier Milei, la caída del poder adquisitivo de los salarios y el plan de privatización y aumento de las tarifas que el gobierno lleva adelante. Es una demostración de unidad de varios sectores estatales y privados organizados en la CGT y CTA que le están diciendo basta a la prepotencia del ejecutivo. En este contexto las bases sociales se siguen organizando para resistir; en asambleas barriales, espacios culturales, centros de estudiantes y sindicatos, haciendo crecer la conflictividad que va tomando formas más elevadas de conciencia contra el modelo neoliberal. Como Partido estamos militando en diversos espacios, tanto en la calle como en las instituciones, para aportar al debate y la organización, que sin duda nos encontrará más temprano que tarde formando parte de un gran frente popular que se presente como alternativa al fascismo neoliberal que hoy está instalado en la Casa Rosada.