DANIEL VIGLIETTI

Trovador del tiempo

El 30 de octubre falleció, en Montevideo, Daniel Viglietti, el gran trovador uruguayo que acompañó y empujó con sus canciones décadas heroicas de lucha del querido pueblo charrúa y de toda la América Latina.

Solo con recordar cuantas niñas -hoy mujeres- llevan el nombre de la protagonista de su inolvidable canción Anaclara, bastaría para un mayúsculo homenaje humanista y revolucionario al que supo cantarle a su pueblo, al amor y a la batalla.

Daniel Viglietti nació en Montevideo un 24 de julio de 1939. Tenía 78 años cargados de versos, corcheas, cárceles, exilios y guitarra. También aplausos por doquier, como cuando regresó al “paisito” y el 1ero de septiembre de 1984 ante miles de personas que lo recibían y abrazaban, dio su recital: “el más emocionante en mis cuarenta años de carrera”.

Pero el aplauso no era lo suyo, y no porque no lo apreciara, sino porque tuvo siempre esa humildad, esa modestia y hasta esa parquedad típica en muchos uruguayos. Esa tranquilidad que hace de Montevideo y de casi todo el Uruguay un lugar maravillosamente extraño en medio de la vorágine global del consumismo y el hedonismo desenfrenados propios de la sociedad burguesa y del neoliberalismo.

Así se lo podía ver tomando un café u otra cosa, o comiendo pizza, tranquilamente, en cualquier bar o pizzería de cualquier barrio, muchas veces con el inolvidable poeta Mario Benedetti, sin que nadie les saltara de cholulo a la yugular, tranquilamente, como unos más de su pueblo sencillo.

Así era Viglietti, el del Chueco Maciel y A desalambrar, el de Me matan si no trabajo y Antesala de un Tupamaro, el que compartió sueños, canciones y lucha con Silvio Rodríguez y los compañeros de la Nueva Trova Cubana, con los del Nuevo Cancionero Argentino de Tejada Gómez, Mercedes Sosa y otros grandes, con Chico Buarque y los demás del hermosísimo canto brasileño, con los queridos chilenos abanderados por Violeta Parra y Víctor Jara, y con Alfredo Zitarrosa y Los Olimareños haciendo el gran trío emblemático de la canción popular uruguaya.

Con todos ellos continuará su vuelo compartido, siempre iluminando el camino de la liberación de nuestros pueblos, de esos que “menos mal que existen para hacernos”.

Desde los años sesenta y setenta del siglo XX a nuestros días del siglo XXI, y para las nuevas generaciones.

Daniel Viglietti, el gran trovador oriental vive! Hasta la victoria, siempre!

R.G.M.