COMUNICADO
Una vez más, el imperialismo pone en peligro la paz mundial
25 de febrero de 2022
Con su habitual cinismo, el mundo occidental se escandaliza por las acciones militares de la Federación Rusa en territorio ucraniano, en particular (y exclusivamente) en sus instalaciones militares. Es necesario hacer un llamamiento a la paz y a una resolución dialogada del conflicto. Lo que no se puede hacer es sumar confusión, ignorar las razones de Rusia y ocultar el verdadero trasfondo que precipitó el actual escenario.
Desde hace más de 25 años, la Federación Rusa viene advirtiendo sobre el avance de la OTAN sobre el este europeo, en dirección a sus fronteras. Una decena de países pertenecientes a la extinta Unión Soviética fueron incorporados a la alianza militar a instancias de los Estados Unidos. Enviaron tropas, apostaron sistemas misilísticos y todo tipo de tecnología bélica en dirección a Rusia. En 2014 derrocaron mediante un golpe blando en Ucrania al gobierno de Víktor Yanukovich e impusieron un gobierno de corte neonazi y títere del imperialismo. De hecho, fue y continúa ilegalizado el Partido Comunista de Ucrania. En simultáneo, se intensificaron las sanciones económicas y financieras contra Rusia con claros objetivos de desestabilización.
Los sucesivos gobiernos de Ucrania no sólo violaron los Acuerdos de Minsk (que establecían una mesa de diálogo con las repúblicas autónomas del Donbáss) sino que propiciaron una matanza en Lugansk y Donetsk (por lo menos 15.000 muertos) en su mayoría población ruso-parlante. En el último período, intentaron mediante formas de guerra no-convencionales imponer gobiernos satélites en Bielorrusia y Kazajistán, limítrofes por el norte y el sur con Rusia. Como corolario, Ucrania declaró su intención de incorporarse a la OTAN (abandonando su status de país neutral) y anunció que comenzaría a producir armamento nuclear ¿Quiénes amenazan y quiénes son los amenazados?
Con la decisión, primero de reconocer a las Repúblicas Populares de Lugansk y Donetsk, y luego desmilitarizar a una Ucrania en manos de neonazis y criminales de guerra, Rusia desactiva un conflicto bélico de dimensiones imprevisibles. Más aún, las potencias imperialistas se dan por enteradas que el mundo de hoy no es el que devino luego del colapso de la URSS, sino que la tendencia a la multipolaridad no tiene retorno de la mano de la Federación Rusa y la República Popular China, la mayor obsesión del imperialismo norteamericano. Estas dos naciones son las verdaderas garantes de la paz mundial en la coyuntura actual y por venir.
PCCE – La izquierda en el Frente de Todos