El 27 de septiembre se realizaron elecciones municipales en la hermana República Oriental del Uruguay, y si bien la derecha oficialista, encabezada por el Partido Nacional, consiguió recuperar algunos departamentos en el interior del país, el Frente Amplio hizo una gran elección en los centros urbanos más importantes y con mayor población. El FA ganó en tres departamentos: Montevideo (1,3 millones de habitantes), Canelones (600 mil habitantes) y Salto (131 mil habitantes). Es decir, el FA gobernará sobre más de 2 millones de los 3,5 millones de habitantes que tiene Uruguay. En Montevideo, capital del país, el frenteamplismo se impuso por más del 50% de los votos y consagró a Carolina Cosse (de origen en la Unión de la Juventud Comunista) como la nueva intendenta de la ciudad. Si bien el Partido Nacional hizo una buena elección unificando el voto derechista, el Frente Amplio consiguió hacerse fuerte en sus bastiones más importantes de cara a la resistencia popular que deberá afrontar el pueblo en los años por venir.