“Por nuestras hermanas y hermanos que dieron la vida por la democracia”

A un año del golpe, el MAS vuelve a gobernar Bolivia con el imponente regreso en caravana de Evo como telón de fondo.

 El 8 de noviembre Luis Arce asumió la presidencia y con esto marcó el retorno de la democracia a Bolivia. Después de ganar las elecciones, el presidente electo y su vice, David Choquehuanca, recibieron los atributos presidenciales frente a una multitud que se congregó ante el Palacio Quemado en La Paz. Con la mano derecha sobre el corazón, Arce juró “por la Patria, por los próceres de la independencia, por nuestra Madre Tierra, por los dioses de nuestros ancestros, por nuestras hermanas y hermanos que dieron la vida por la democracia”, en homenaje al heroico pueblo boliviano que fue capaz de sobreponerse a la violencia para obtener una resonante victoria electoral, pese a la proscripción de Evo Morales y todos los escollos impuestos por la derecha.

 Arce denunció la persecución y la masacre llevada adelante por el gobierno de facto que derrocó a Evo Morales en 2019 y señaló que “iniciamos una nueva etapa en nuestra historia y queremos hacerlo con un gobierno que sea para todas y para todos, sin discriminación. Nuestro gobierno buscará en todo momento reconstruir nuestra Patria y vivir en paz. En este camino, la democracia es un valor fundamental de los pueblos”.

 Asimismo, el presidente sostuvo que Bolivia atraviesa en este momento tres crisis: la institucional, la sanitaria producto de la pandemia de coronavirus y la económica. “Vamos a trabajar para recuperar los niveles de crecimiento que el gobierno de facto hizo añicos”, prometió quien fuera ministro de Economía del país y sostuvo que la democracia implica proteger “el acceso a la salud, a la educación, al trabajo, a los ingresos y a la vivienda”. “Democracia es el derecho de disfrutar de la riqueza que es para todos, no para unos cuantos”. Durante su discurso de asunción, también promovió la reactivación de la UNASUR y manifestó su apoyo a la CELAC: “Reivindicamos la integración Sur-Sur en un mundo globalizado donde no se impongan designios desde el Norte”.

 Presente en La Paz, Alberto Fernández recibió el saludo, el afecto y el agradecimiento de todo el pueblo boliviano, así como de los dirigentes políticos del oficialismo, por haber sido uno de los protagonistas del operativo que hace un año le salvó la vida al entonces presidente Evo Morales y a su vice Álvaro García Linera. El presidente argentino mantuvo, durante las horas que estuvo en la capital boliviana, reuniones bilaterales con el presidente Luis Arce y con el colombiano Iván Duque. También, junto al vicepresidente de España, Pablo Iglesias, y el presidente Arce firmó la “Declaración de La Paz en Defensa de la Democracia”. Alberto resaltó que en Bolivia “se terminó la pesadilla que duró un año exacto”.

Evo, Alberto y el retorno a la Patria

 Mientras tanto, Evo comenzaba el retorno a su patria. En Jujuy, el líder del MAS visitó la casa Milagro Sala. Durante el encuentro, Morales recordó que “lo más importante es la unidad de los indígenas y trabajadores superando los problemas internos, nunca debemos claudicar en nuestra ideología”, agregó. “Mucha fuerza a la hermana Milagro Sala, estamos contigo y nunca te vamos a abandonar como pueblo”. La líder social reconoció la labor de Evo: “ustedes devolvieron conciencia y dignidad, el pueblo respondió con las urnas para sacar a los gorilas del gobierno”, añadió Sala.

 Alberto estuvo unas pocas horas en Bolivia y se trasladó a la ciudad jujeña de La Quiaca. Allí cenó con Evo, Linera y el resto de la comitiva. Al día siguiente, en un acto emotivo y cargado de simbolismo político, el presidente se reunió con Evo Morales para acompañarlo a cruzar el paso fronterizo con la ciudad de Villazón en su regreso a Bolivia luego de un año de exilio en el exterior, primero en México y luego en la Argentina. “Alberto Fernández me salvó la vida. Muchas gracias”, aseguró Evo durante un acto colmado de simpatizantes, globos y banderas de Bolivia y Argentina. Alberto Fernández, además, recordó que Argentina y Bolivia son “parte de una patria grande, una patria que quiere abrazar a todos, no a algunos”.

 Evo comenzó en Jujuy la caravana de regreso a la Patria. Una caravana de reencuentro con su pueblo, con impresionantes muestras de afecto y celebración popular en cada distrito o simplemente al costado del camino, en un histórico viaje de más de mil kilómetros por tierra hasta la región de Chimoré desde donde partió, junto a su vice y compañero Álvaro García Linera, hacia el exilio.

Lucho Arce

  • “Desde la recuperación de la democracia en Bolivia, en 1982, que fue producto de la lucha del pueblo boliviano, nunca como hasta ahora se ha tendido a evidenciar una democracia mutilada de sus contenidos centrales. Una inmensa mayoría plurinacional enfrentó el peligro de la proscripción, la criminalización y la persecución.”
  • “Se estigmatizó a los movimientos sociales, a campesinos e indígenas y obreros. Se nos llamó de salvajes, de sediciosos, de terroristas. Se humilló a las mujeres de pollera, se quemó nuestra Wiphala, que es como quemarnos a nosotros mismos, como quemar nuestras raíces, desde sectores minoritarios de la población, como quedó en evidencia en las elecciones de octubre pasado se quería una democracia sólo para unos pocos. En los hechos, estos sectores minoritarios levantan la bandera de la democracia sólo cuando les conviene.”
  • “De nada sirve elegir a las autoridades mediante el voto si a la vez el pueblo al que se debe la democracia está privado de los derechos fundamentales. Democracia es tener el derecho de disfrutar de la riqueza que es para todos y no para unos cuantos, y eso lo hicimos en 14 años y eso vamos a profundizar en nuestro Gobierno: la redistribución del ingreso, los bonos siempre irán de la mano de nuestra política económica.”
  • “Asumimos con fuerza hoy más que nunca los principios de la autodeterminación de los pueblos, la no intervención, el no alineamiento y la plena igualdad jurídica y política de todos los estados sin ninguna forma de subordinación. Apostamos por una integración emancipadora y no subordinada. Reivindicamos la integración Sur- Sur en un mundo globalizado en que no se imponga designios desde el Norte.”
  • “Propugnamos la unidad política de la diversidad de América Latina y el Caribe, la CELAC es la mejor vía para conquistar tan noble e histórica causa. Volvemos a ser nuestra resolución de la CELAC de 2014, cuando declaramos a América Latina y el Caribe como un territorio de paz. En la subregión, planteamos la recuperación de la Unasur como espacio de integración y un mecanismo de concertación política en la que nos encontremos todos, independientemente de la orientación política de los gobiernos.”

Alberto en La Quiaca

  • “Se puede hacer, Evo lo demuestra, lo hizo tan bien que algunos se molestaron y no lo dejaron seguir haciendo, pero bueno, el pueblo sabe. Del otro lado de este puente hay miles de bolivianos que esperan abrazarlo a Evo, abrazarlo a Álvaro, ¿y saben por qué? Porque el pueblo no se equivoca y han vuelto por las urnas a reivindicar el proyecto, que Evo representa.”

Evo en La Quiaca

  • “Saben ustedes que pensamos que Bolivia tenía mucho futuro, mucha esperanza y recuperamos los recursos naturales, nacionalizamos los recursos básicos, garantizamos la soberanía, la independencia del Estado, garantizamos la dignidad de un pueblo, ese fue nuestro delito. Y el año pasado el golpe. Golpe a nuestro modelo económico, a nuestros recursos naturales. Y quiero decirles que no dudaba que íbamos a volver, pero no que iba ser tan pronto. Algo histórico e inédito, gracias al pueblo boliviano y muchas autoridades del mundo.”
  • “Somos la Patria Grande, un pueblo en el que trabajamos en solidaridad, pero también en complementariedad. Tengo muchos recuerdos del hermano Néstor Kirchner cuando empezaba como presidente, su orientación, su ayuda. La lucha sigue. Mientras exista el capitalismo y el imperialismo la lucha de los pueblos continuará, de eso estoy convencido hermanas y hermanos. Muchas gracias, hermano Alberto por acompañarme, por garantizar mi seguridad y quiero que sepan que Alberto Fernandez me salvó la vida de eso nunca nos vamos a olvidar. ¡Muchas gracias, hermanas y hermanos!”