Pospandemia y proyecto de país

CAMINO A LAS LEGISLATIVAS

Con el cierre de listas concluido, comienza a proyectarse la discusión electoral de cara a las PASO. El Frente de Todos buscará consolidar su mayoría y quórum propio en la Cámara Alta, y estirar su representación en Diputados, donde depende más de los acuerdos con aliados circunstanciales. La coalición gobernante supo preservar su unidad y sopesar la diversidad de posiciones, con un rol determinante de la compañera Cristina y una composición de candidatas y candidatos identificados mayoritariamente con su liderazgo, especialmente en la provincia de Buenos Aires. Romper el FdT fue el objetivo del poder real desde el día 1 del gobierno de Alberto. No lo lograron. En el campamento de la derecha, la elección de medio término servirá para dirimir liderazgos internos, que más allá de formas o matices, no difieren en el horizonte neoliberal. De cualquier manera, se están tirando con todo lo que tienen a mano.

La pandemia expuso como pocas veces la crisis estructural del capitalismo a nivel global. En particular, las enormes desigualdades entre países, y al interior de los países. El 55% de las personas que han recibido al menos una dosis son de países de altos ingresos, es decir el 15% de la población mundial, que acapara más de la mitad de las vacunas. Se agudizó la concentración del poder transnacional y el imperio de la timba financiera. Quienes eran multimillonarios, hoy son mil millonarios. Miles de millones de personas en el mundo perdieron sus empleos, que no recuperarán. Siempre es válida la discusión en torno al rol del Estado, en particular en una etapa histórica donde la existencia de los estados-nación constituye un escollo para la reproducción del capital. Lo cierto es que sólo los países socialistas, junto a aquellos gobiernos que se plantan frente a la depredación neoliberal, buscaron preservar las vidas humanas.

El imperialismo actúa cada día con mayor virulencia. Tiene los pies de barro, pero sigue siendo el gigante que te puede poner la bota encima, como advertía Martí. Días atrás, Biden anunció la incorporación de 25 cazas de última generación a su flota del Pacífico en el marco de las crecientes provocaciones contra la República Popular China en torno al Mar Meridional. La OTAN continúa realizando un despliegue de fuerzas sin precedentes sobre la frontera occidental rusa, en tándem con el recrudecimiento de sanciones económicas contra el gobierno de Vladimir Putin. En América Latina, en el transcurso de un mes, buscaron arrinconar al sandinismo en Nicaragua, se ciernen sobre Cuba Socialista e intentan desestabilizar a Pedro Castillo en el Perú, antes de que asuma. Conforme pasan los días, se conocen más elementos de la participación directa de los yanquis en el golpe contra Evo. Macri tendrá que responder por su colaboracionismo cipayo.

En su alegato por la causa Memorándum, Cristina explicó cómo se utilizó el lawfare para endeudar, condicionar y arrodillar a nuestro país. Volvió sobre la idea en la presentación de los candidatos del Frente de Todos de Buenos Aires y CABA. La campaña electoral es una oportunidad para discutir cuál va a ser el país de la pospandemia: cómo discutimos con el FMI; cómo abordamos el tema de los precios; cómo transformar al poder judicial; qué hacer con el sistema de salud en el actual contexto nacional y global. Son cuestiones que viene planteando la compañera, pero que la emergencia sanitaria de alguna forma pospuso.

La derecha oscila entre el coaching, el marketing político y, ahora, el todos contra todos. Las fuerzas populares, hoy con la posibilidad de ser gobierno, tenemos que definir cuestiones centrales, que incidirán de forma inequívoca en los próximos dos años. Esto es lo que debemos discutir en el seno de nuestro pueblo, desde nuestra responsabilidad militante.