CRECEN LAS INVERSIONES EN EL PAIS

El repunte económico

Cuando el Frente de Todos se impuso en las elecciones presidenciales en octubre del 2019, uno de ejes de la campaña era recuperar el aparato productivo nacional, que durante el gobierno macrista fue socavado, principalmente por medidas que favorecieron al capital extranjero especulativo. Nadie se imaginó que ese panorama se iba acrecentar con la llagada de la pandemia. 

Algunos sectores con intenciones destituyentes intentan “disfrazar” la agonía que produjo el macrismo, aludiendo a números imprecisos para de esta forma intentar incluir al último gobierno de Cristina de Kirchner como parte de un proceso económico en debacle. Se olvidan de mencionar que en ese periodo nuestro país tenía una economía desendeudada y sin injerencia del FMI. 

En el último tiempo asistimos a un desfile de “seudos economistas” por todos los medios de comunicación, que pronostican cierto descontento del sector empresarial, y advierten que después de las elecciones se viene el ajuste, o el estallido por la bomba electoral, ya sea por vía cambiaria o por desborde inflacionario. A pesar de la acción desestabilizadora de los formadores de precios, los datos duros de la economía desmienten cualquier pronóstico televisivo. 

En comparación con el año pasado, la económica creció 10,8 por ciento, todavía 2,2 puntos porcentuales por debajo del nivel prepandemia (febrero 2020). La industria manufacturera creció 11,7 por ciento en junio, en comparación a junio de 2019. En el primer semestre de 2021 aumento 4,6 por ciento respecto al mismo semestre de 2019. La recuperación industrial se está notando en el crecimiento del empleo: son 12 meses consecutivos con creación de puestos de trabajo, siendo que a la fecha ya hay 23 mil puestos industriales más que a finales del 2019. 

Otro dato importante tiene que ver con las inversiones que se generaron en el último período. En este primer trimestre del 2021, éstas crecieron un 14 por ciento respecto de la media del 2019. Los anuncios de la firma Whirlpool, que abrirá una planta en el partido de Pilar, con 280 trabajadorxs, y una inversión de 40 millones de dólares; la industria Maro, autopartista, realizará una inversión de 9,5 millones de dólares en su fábrica en Baradero, aumentando su planta de operarios de 212 a 302 trabajadorxs. Otro anuncio importante es el del fabricante Nike, que inauguró una planta para fabricar medias en la localidad de Malvinas Argentinas, en el conurbano bonaerense, también con una inversión aproximada de 800 millones de pesos, lo que le va a permitir sumar a 50 operarios para llegar al plantel total de 200 hacia finales del año que viene. Estos son algunos ejemplos de la realidad que venimos transitando. Textiles, indumentaria, calzado, maquinaria agrícola, heladeras, lavarropas, autos, bicicletas, entre otros rubros fabriles, atraviesan procesos de recuperación productiva, con alzas que en la mayoría de los casos superan los niveles de 2019. A pesar de los efectos propios de la pandemia, la industria encuentra una mejor perspectiva que la que tenía con el modelo neoliberal de Cambiemos. Lejos de los pronósticos apocalípticos de la derecha y sus socios mediáticos, el gobierno avanza con medidas claras en favor de la producción y el trabajo.