Se lo llevaron porque él organizaba”, dijo un compañero sobre la desaparición forzada del camarada Elvio Ángel Bel, que tuvo lugar el 5 de noviembre de 1976. Después de 44 años, el Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia sentenció a Tito Nichols, titular del Departamento de Informaciones de la Policía, Presidente de la Cooperativa Eléctrica de Trelew y Concejal hasta el 2004 por el PJ, a 6 años de prisión. Se reemplazó la placa de Nichols en el HCD de Trelew por la foto del camarada Bel, en un acto verdaderamente reparador. Lo que sigue: apelación de la sentencia y exigencia de castigo de 17 años para Nichols, condena para Hernán Hermelo (quien fuera absuelto) y orden de investigar para dar con el paradero de los restos que aún no fueron hallados. Ángel tuvo dos escuelas que forjaron su vida. La primera fue su formación como maestro rural en la escuela Juan Bautista Alberdi de Paraná. La segunda, el Partido, al que se afilia cuando ya se encontraba en Chubut, tras el servicio militar y ejerciendo la docencia primero en un paraje de la Meseta, y luego en Rawson y Trelew. Detenido y recuperado por su pueblo en la histórica toma del Teatro Español (conocida como el “Trelewaso”) porque Ángel encabezó el movimiento de solidaridad con los presos de Trelew en el 72 que terminó en masacre, siendo apoderado de la familia de Roberto Santucho. Fue despedido del sistema educativo por aplicación de la ley anti subversiva, y se esperaba una detención “más” de todas las que había sufrido en su trayectoria militante, cuando irrumpe el golpe del ‘76. Otro destino sería hoy el del paraje de la meseta, que lucha aislada y despoblada por sus derechos básicos. Y todas las luchas que se libran en conjunto, por erradicar la megaminería saqueadora, hambreadora y contaminante, con el compromiso de la Unión de Asambleas Comunitarias, de la que participan camaradas, y todas las asambleas provinciales. La lucha por el pago de salarios adeudados a estatales, docentes, jubilados, los textiles, que cobran muy por debajo de la canasta básica y por los despidos de 264 trabajadores de la pesquera FYRSA, al grito de “sin salarios no hay cuarentena”, con campañas de donaciones y ollas populares, para paliar una situación de arrastre y hoy insostenible con la pandemia. Mientras Arcioni, gobernador de Chubut, se abraza a las trasnacionales. Pero las ideas y principios que supo sembrar Ángel con su conciencia, con su entrega militante, están intactas y multiplicadas.
