RAIMUNDO ONGARO

Hito del sindicalismo argentino

Este 1º de agosto, a la edad de 92 años, en su casa de Los Polvorines del partido bonaerense de Malvinas Argentinas, falleció el emblemático dirigente sindical argentino Raimundo Ongaro, militante de la Resistencia Peronista que marcó una época del gremialismo y la política nacional en los años 60 y 70.

Histórico líder de la Federación Gráfica Bonaerense, peronista y católico como el que más, latinoamericanista y antimperialista, en los años 60 enfrentó a la dictadura de Juan Carlos Onganía y a la corriente burocrática, traidora y colaboracionista de Augusto Timoteo Vandor en el seno del movimiento obrero argentino.

Fue cofundador de la CGT de los Argentinos junto a Agustín Tosco y otros grandes del sindicalismo clasista y combativo de esos tiempos, y en aquel Congreso Normalizador “Amado Olmos” de la CGT del 28 al 30 de marzo de 1968 fue electo Secretario General, a pesar de las maniobras vandoristas de vaciamiento del Congreso.

Desde tal condición, junto a Rodolfo Walsh, fue corredactor del histórico “Programa del 1º de Mayo de 1968” de la CGT de los Argentinos por la Liberación Nacional y Social, y dieron vida al semanario “CGT de los Argentinos” para librar la batalla de ideas contra la dictadura fascista de los monopolios y contra la burocracia sindical cómplice de la misma.

Catorce veces preso a lo largo de su vida, su última prisión sería a fines de 1974, en tiempos de López Rega, siendo deportado a Perú a mediados de 1975. Su hijo Alfredo Máximo había sido asesinado por la Triple A en mayo del 75 y el resto de su familia estaba amenazada de muerte.

Regresó del exilio en 1984, tras la recuperación de la democracia, volvió a ser electo Secretario General de su gremio, y lo sería hasta el mes de abril del año pasado.

A propósito de su deceso, el actual titular del gremio gráfico Héctor Amichetti dijo: “Nuestro compañero es y será la guía de la posición histórica del sindicalismo de liberación. Sufrió cárcel, exilio, y hasta el asesinato de un hijo con tal de mantener en alto esas banderas”.

Y la compañera Cristina Fernández de Kirchner, presente en la Federación Gráfica Bonaerense durante la despedida de sus restos afirmó: “Raimundo marcó un hito para mi generación y para la Historia”.

Y podemos decir también, en nombre de los comunistas que compartieron militancia con él, que esperamos que su memoria sirva para marcar a fuego a los traidores y colaboracionistas del vandorismo de hoy.

R.G.M.