EL DESASTRE MILEI
Economía estancada e industria derrumbada
Los datos de los últimos meses siguen mostrando una industria nacional en caída. Según el Índice de Producción Industrial (IPI) elaborado por FIEL, en junio la actividad cayó 1,2% frente a mayo y retrocedió 0,8% en el segundo trimestre respecto de los primeros tres meses del año. A esto se suma el impacto de la apertura importadora indiscriminada, que todavía no se refleja del todo en los números del primer semestre. En cuanto a las pymes industriales, ocho de cada diez planea despedir personal o no contratar más. La presión de costos en dólares se agrava cada día por el atraso cambiario: en apenas tres meses aumentaron 18,9%, muy por encima de la inflación trucha del 5,49% medida por el INDEC en ese lapso. Sumado a esto, el modelo de carry trade hace que el crédito sea inaccesible. Las tasas de interés por las nubes anulan cualquier tipo de financiamiento e impiden que aumente la inversión para mejorar la productividad. La tasa de inversión con Milei es más baja que la de cualquier gobierno anterior que se analice. Mientras tanto, volvemos a una moda del menemismo: cada vez más compañías argentinas abandonan total o parcialmente la producción local para reemplazarla por productos importados. En junio, las importaciones crecieron 53% interanual y alcanzaron el 32,4% del PBI, el nivel más alto en un siglo, según la consultora Audemus. En este contexto, sectores como el petroquímico, la metalurgia, el calzado deportivo y el automotriz (caso Nissan por ejemplo) ya redujeron o trasladaron su producción al exterior.
Los servicios también caen
A la vez, el consumo en bares y restaurantes se desplomó entre un 20% y 30% en lo que va de 2025, el doble de la baja registrada en 2024. Esto golpea tanto al turismo como al público local, que redujo salidas y opta por propuestas más austeras. Al derrumbe de la demanda se suman costos fijos en alza. Las boletas de servicios se duplicaron y los alquileres se dispararon, presionando negocios que ya no logran cubrir sus gastos con la facturación actual. Daniel Prieto, presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés (AHRCC), señaló que la caída interanual ronda el 30% y que el turismo dejó de ser un sostén como en otras crisis. “Antes bajaba el turismo pero subía el consumo local; ahora bajaron ambos”, advirtió. El déficit turístico del primer cuatrimestre marcó un récord con un saldo negativo de 5,1 millones de personas. La temporada de vacaciones de invierno, que rezaban para levantar cabeza, también fue un desastre. Según Roberto Amengual, presidente de Amérian Hoteles, algunos destinos sufren caídas de ocupación de hasta el 40% frente a 2024, mientras los costos crecieron entre un 50% y un 800%, con saltos extremos en luz, agua, gas e impuesto inmobiliario.
En las puertas de otra crisis de deuda
En paralelo, el premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz, advirtió que Argentina enfrenta un alto riesgo de una nueva crisis, impulsada por la deuda con el FMI contraída tanto por Milei como por Macri. El economista señaló que el préstamo de u$s44.000 millones tomado en 2018 y el reciente de u$s20.000 millones agravan la fragilidad financiera del país. También recordó que en 2015 Argentina tenía bajos niveles de deuda, pero que la política económica impulsada por Macri derivó en el préstamo récord -e ilegal- del FMI y en su posterior fuga. “Los más ricos sacaron el dinero sin que se comprobara qué hicieron”, afirmó. Sobre Milei, dijo que su gestión profundiza el problema. “No pudieron pagar el préstamo anterior y ahora suman más deuda que tampoco podrán afrontar”. Ante estos dichos, el presidente argentino, en un ataque de odio y desquicio mental, tildó al economista de “basura inmunda” y lo culpó por la última disparada del dólar que casi tocó los 1.400 pesos.
Conciencia de clase
Si bien las perspectivas a futuro -de continuar este gobierno- son calamitosas, muchos trabajadores continúan sosteniendo cierto nivel de esperanza -ciega- ante la momentánea y falsificada baja inflacionaria. El caso de la metalúrgica Acindar de Villa Constitución es elocuente. La empresa, que sostiene gran parte del empleo de la ciudad, está en crisis despidiendo a mansalva. En pleno conflicto, se realizaron las elecciones locales -el pasado 29 de junio- y La Libertad Avanza salió primera. Esto sucede en una ciudad históricamente combativa con fuerte tradición sindical. Dirigentes gremiales señalan que parte de la población sigue enojada con el gobierno de Alberto Fernandez y caen en la “antipolítica”. Se le suma a esto la nueva camada de trabajadores informales, “digitales” y monotributistas explotados y retroalimentados por un modelo neoliberal que destruye poder adquisitivo y empleo registrado. Es de suma importancia redoblar esfuerzos en cada lucha gremial de este tipo, transformar en nacional todo conflicto local y volver a poner foco en la lucha por la conciencia de clase, para construir las condiciones subjetivas para la defensa de los intereses de los trabajadores y su avance.
Un esquema cambiario insostenible
En apenas unos pocos días el dólar oficial alcanzó los 1.385 pesos, rozando el techo del esquema de bandas inaugurado en abril de 2025. Esto, a pesar de que la mafia que ocupa el Ministerio de Economía venía interviniendo de forma desesperada para frenar cualquier subida, mientras el ministro Caputo se burlaba con su “si está barato andá a comprar campeón”. Al final se lo llevaron puesto y el dólar acumula una devaluación del 30% desde el inicio del esquema. En el último mes pasó de unos 1.200 pesos por dólar a casi 1.400. Las intervenciones por ahora vienen siendo indirectas a través de la venta de dólar futuro y subiendo a niveles de usura las tasas de interés. La posición vendida en futuros pasó de USD 1.950 millones en mayo a unos USD 4.000 millones en julio, lo que eleva el riesgo de que, ante subas del dólar, el Central deba emitir más pesos para cubrir diferencias. Lo mismo sucede con las tasas de interés que multiplican la cantidad de dinero mes a mes. Ante el fracaso de renovar la deuda en pesos el gobierno convalidó tasas anuales cercanas al 65% potenciando el carry trade. Así y todo, cada día que pasa “el mercado” les cree menos y la presión sobre el tipo de cambio se torna insostenible. Los multimillonarios parásitos y oligarcas festejan las altas tasas mientras gran parte de la industria nacional y las pymes se funden. Ni hablar de la calidad de vida de la clase trabajadora. Milei mientras tanto sale a gritar e insultar en programas oficialistas echando culpas a diestra y siniestra, planteando una conspiración internacional para provocarle una corrida cambiaria. Su vicepresidenta, a la que tilda de traidora, sería parte de la misma. También el premio nobel de economía, Joseph Stiglitz, al que calificó de “basura inmunda” por criticarlo. El “economista experto en crecimiento económico con o sin dinero” decía no hace mucho que el dólar iba a caer a 600 pesos. Hoy está cerca de los 1.400. Si llega sobrepasar ese límite van a comenzar a dilapidar los dólares del FMI para mantenerlo a raya. Lo único que les interesa es llegar a las elecciones sin una disparada mayor. Así y todo, por la última suba ya hubo remarcaciones: Mondelez aumentó sus precios entre 7% y 9%; Unilever 8%; SC Johnson 7%; Softys 7%; AGD y Molinos Cañuelas 5%; Arcor entre 3% y 5%; La Serenísima 4% y Danone 3,5%, solo por nombrar algunas marcas.
Continúa el industricidio
- ACINDAR: Histórica metalúrgica de Villa Constitución, Santa Fe, y parte del grupo ArcelorMittal, paralizó el 85% de su producción y suspendió a 500 trabajadores hasta el 4 de agosto, en un contexto de fuerte caída de ventas y sobrestock de acero. Desde la asunción de Milei ya redujo su plantel de 1.230 a 930 obreros, mediante despidos y retiros “voluntarios” forzados.
- LUMILAGRO: Importante fabricante argentina de termos, despidió a más de 200 trabajadores y anunció que el 60% de su producción será importada desde China, tras la eliminación de aranceles y la caída de ventas. La empresa apagó sus hornos de termos de vidrio, alquiló parte de su planta en Tortuguitas, Provincia de Buenos Aires, y adoptó un esquema mixto con fabricación local reducida al 40%.
- KIMBERLY-CLARK: Empresa multinacional que produce principalmente la marca Kotex, enfocada en protección femenina y pañales para bebés bajo las marcas Huggies y Kimbies, además de otros productos de consumo masivo como Kleenex y Scott, cerró su planta en el Parque Industrial de Pilar (Provincia de Buenos Aires), dejando sin empleo a 220 trabajadores y sin ofrecerles reubicación, mientras comienza a importar parte de sus productos desde Brasil.
- METALÚRGICA FUTURA: Cerró su planta en el parque industrial de Gualeguaychú, Entre Ríos, y despidió a 20 de los 22 empleados que quedaban (ya venía despidiendo desde el año pasado), atribuyendo la medida a la baja demanda, la apertura masiva de importaciones y los altos costos operativos impulsados por las políticas de Milei. La producción ya estaba paralizada y la empresa había ofrecido retiros voluntarios antes del cierre, en un contexto de pérdida de clientes clave como Vaca Muerta, que optó por importar piezas.
- ALGODONERA AVELLANEDA DE SANTA FE: Perteneciente al Grupo Vicentín, despidió a fines de julio a unos 30 trabajadores con más de 15 años de antigüedad en promedio y busca pagarles solo el 50% de las indemnizaciones amparándose en el artículo 247 de la Ley de Contrato de Trabajo, que contempla reducciones por fuerza mayor o falta de trabajo (dicen por derrumbe del consumo). La empresa está en concurso preventivo desde diciembre de 2024 y atraviesa una grave crisis con riesgo de quiebra que amenaza a mas de 180 empleos.
- LÁCTEOS VERÓNICA: Con tres plantas en Santa Fe, enfrenta una crisis financiera terminal, con más de $6.600 millones en cheques rechazados, producción paralizada y deudas salariales. La empresa pidió un Procedimiento Preventivo de Crisis para despedir a 210 empleados con el 50% de indemnización, suspender al 30% del personal y reducir salarios y jornadas, alegando la caída del consumo, el aumento de costos y la concentración del sector en manos extranjeras. El gremio Atilra rechaza se encuentra en pie de lucha.
- CERÁMICA CORTINES: Histórica fabricante de cerámicos esmaltados de Pilar, Provincia de Buenos Aires, sigue profundizando su crisis con al menos 65 despidos tras meses de suspensiones y una planta casi paralizada desde inicios de este año. La empresa, que desde que asumió Milei redujo sus ventas cerca de un 50%, enfrenta una caída sostenida de la demanda y proyecta un 2025 aún peor. Los trabajadores rechazan el plan de reestructuración con retiros voluntarios e indemnizaciones en cuotas.