XVI CUMBRE DEL ALBA
De pie y dispuesta a resistir
En un encuentro celebrado en La Habana y con la consigna “Alba es futuro”, los países miembros de la alianza firmaron decenas de acuerdos y enviaron un contundente mensaje de unidad y fortaleza frente a los intentos del imperialismo de reconquistar la región.
Catorce años después de su fundación (un 14 de diciembre de 2004) como fruto de la visión geoestratégica de Fidel Castro y Hugo Chávez, el ALBA continua vibrante y fortaleciéndose cada día más. Hay que aclarar que este encuentro no fue una cumbre más ni un simple aniversario, ya que fue llevado a cabo en medio de la reciente arremetida imperialista contra los gobiernos populares y progresistas de la región, y tras el avance registrado por algunas fuerzas reaccionarias en Sudamérica, concretamente en Brasil. El evento contó con la presencia del Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba, Raúl Castro, y del presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de la Isla, Miguel Díaz-Canel, además de los mandatarios y representantes de Venezuela, San Cristóbal y Nieves, Bolivia, Nicaragua, San Vicente y las Granadinas, Dominica, Antigua y Barbuda, Santa Lucia, Granada, entre otras naciones invitadas.
“No hay naciones pequeñas si sus pueblos entienden y asumen el desafío de unirse para convertirse en gigantes. La Patria Grande nos reclama estar unidos para seguir forjando nuestra segunda y definitiva independencia”, sostuvo Díaz-Canel al dar la bienvenida a todas las naciones de la Alianza, para luego enumerar las conquistas y avances conseguidos desde la creación de la entidad. Los más de 11.000 médicos formados en las escuelas latinoamericanas de medicina de Cuba y Venezuela; los más de 2.200.000 latinoamericanos y caribeños operados de la vista; las más de 30 millones de consultas oftalmológicas; el millón y medio de discapacitados atendidos; los más de 4.000.000 de alfabetizados, siendo tres los países de la Alianza declarados Territorios Libres de Analfabetismo: Venezuela en 2005, Bolivia en 2008 y Nicaragua en 2009. En cuanto a la economía, Díaz-Canel se refirió a la creación del Banco del ALBA, que ofrece financiamiento para proyectos económicos productivos; y a las transacciones comerciales solidarias, como el intercambio de petróleo por servicios de salud y educación.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se refirió a la agenda futura de la Alianza. Propuso utilizar la criptomoneda Petro para las transacciones entre los países aliados. “Hay que revitalizar los esfuerzos en el pensamiento económico, para construir un modelo unificador, pues el neoliberalismo sigue teniendo fuerza. Es mentira que cada quien por su lado va a lograr el desarrollo económico, necesitamos potenciar la integración”, dijo, a la par que detalló los nuevos planes del imperialismo yanqui para derrocar a su gobierno. “Venezuela no es una amenaza para nadie, no está perturbando la paz mundial, no se encuentra en medio de una guerra civil, no hay ningún tipo de condición del derecho internacional que les permita (a EE.UU.) intervenir en Venezuela”.
El comandante Daniel Ortega explicó también lo que estaba aconteciendo en Nicaragua y cómo la injerencia norteamericana afectó el crecimiento económico record que venía sosteniendo el gobierno sandinista (tasas superiores al 5% anual por más de diez años consecutivos). En el caso de Bolivia, Evo planteó cómo EE.UU. no pudo dinamitar el exitoso modelo económico del Movimiento al Socialismo. Así, Bolivia cerrará este año con un crecimiento del 4,7% de su PBI, de los más elevados en el continente. Cuba socialista también crecerá un 1,1% pese al bloqueo.
Tras firmar el documento final y diversos acuerdos de cooperación, Miguel Díaz-Canel cerró la cumbre valorando los avances realizados, a pesar de la política cada vez más hostil de los Estados Unidos, y llamó a redoblar los esfuerzos para ir recuperando la región de las garras del neoliberalismo, como ya sucedió recientemente en México tras el triunfo de López Obrador. “Es preciso defender contra viento y marea la plena vigencia de la alianza”, finalizó el presidente cubano.
