¿CÓMO CUIDAMOS LAS RESERVAS?

Festín en el comercio exterior

La Aduana está dando a conocer detalles de maniobras e irregularidades que se utilizan para desangrar las reservas del Banco Central. Representan una muestra de lo que venimos denunciando. Los casos más sonados en estos días fueron: una empresa de Tierra del Fuego que simuló comprar placas de video para la criptominería por 1,5 millones de dólares, pero detrás de esta fachada se escondía “basura tecnológica” con un valor real que no supera los 30 mil dólares. Considerando la brecha entre el dólar oficial y el dólar contado con liquidación, de haber prosperado la maniobra la empresa obtenía una ganancia ilícita de 300 millones de dólares. Las alarmas se encendieron porque la facturación era de fecha anterior a la constitución de la otra empresa con sede en Delaware, EE.UU., lo que significaba que todo se trataba del mismo dueño.
Otro caso está relacionado con la importación de barbijos sobrefacturados desde China, en la que se estima que el valor real era 563.000 dólares, mientras que el valor declarado en las operaciones investigadas fue de 4.120.000 millones de dólares, es decir una sobrefacturación total estimada de un 730%. Fueron dos empresas textiles, declararon valores muy superiores a los del mercado internacional e inclusive local (0,967 dólares valor unitario en origen) unos $130 cada uno, cuando comercios minoristas pueden adquirir el mismo producto a un precio unitario inferior y hasta se ofrecen 5 por $100 en el transporte público.
También hay subfacturación para evadir derechos de exportación: a mediados de julio se detectó en una empresa de litio, que generó un perjuicio de 8 millones de dólares. La firma local exportaba a valores sustancialmente inferiores a los estimados del mercado y a los utilizados por otro exportador comparable.
Entre otras maniobras varias, triangulación de empresas de servicios de Vaca Muerta, irregularidades en importaciones de motos, granos ocultos en neumáticos, neumáticos nuevos ocultos dentro de otros neumáticos, encomiendas sin razón aparente, 500 mil dólares ocultos en aviones, operaciones irregulares en zona franca y las que no se detectan.

COMPRA DE CAUTELARES

Según datos de la Aduana, ya hay más de 1800 millones de dólares de importaciones que se hicieron vía cautelares. Son empresas que no obtienen la autorización del Estado para acceder a los dólares, y entonces presentan cautelares, la justicia les hace lugar y obliga al Banco Central a darle las divisas. Unas 500 empresas accedieron al dólar oficial de esta manera. El caso más reciente es una empresa que importó toallas por 20 millones de dólares.
Por otro lado, la empresa Yoko S.A. “alquiló” su cautelar obtenida, se la cedió -sin que nadie advirtiera la maniobra- a otra firma llamada Tropea S.A. para que pueda realizar operaciones por fuera del marco de la ley. El caso trascendió por un twitter de Cristina.

DATOS TESTIGOS

En estos días, Pablo Moyano incorporó algunos elementos al pedir la estatización de las balanzas en los puertos. Sostuvo que “hay 5 millones de viajes de camiones por año, y el 40% sale en negro. Eso quiere decir que el campo no paga el 33% de las retenciones, sino que paga el 26%”. Sumado a ello, las 7 mil toneladas de granos sin declarar encontrada días atrás, listas para comercializarse en negro, unos 230 camiones de carga, que puestos en fila son 5 kilómetros de ruta.
También desde el transporte se advierten otras irregularidades o falta de control: “las mineras que están en la cordillera, son todas extranjeras (…) Llevan los minerales por Chile y los procesan en destino. Quiere decir que a los tres meses, te dicen ‘de las 100.000 toneladas de piedra, encontramos 100 gramos de oro’”, dijo Pablo Moyano ejemplificando la falta de control.
Está claro que hay otro camino para cuidar las reservas que no sea el ajuste sobre la clase trabajadora.