COVID 19

La vacuna, cada vez más cerca

En su último anuncio público desde Olivos, el Presidente Alberto Fernández comunicó que se encuentra trabajando junto al Fondo Soberano de Rusia para lograr un acuerdo entre países para la provisión de las nuevas vacunas Sputnik V contra el coronavirus, que actualmente se encuentra culminando su fase 3 de laboratorio. Se estima que, tras el acuerdo, serán cubiertas cerca de 20 millones de personas en dos dosis que deberán ser aprobadas previamente por ANMAT. Según las últimas estimaciones, el contingente llegará al país para fines de este año. El Presidente destacó que aplicar la vacunación no será fácil, ya que implicará preparar un enorme operativo en el que se verá involucrado el Ministerio de Salud, el Ministerio de Defensa, el de Seguridad y el del Interior, junto con las 23 provincias argentinas.

Los resultados preliminares de efectividad de la Fase 3 de la Sputnik V, llamada así en honor al primer satélite soviético, estarán disponibles a mediados de noviembre. Será producida en laboratorios de China, India y Corea, y ya ha sido probada en 15 mil personas con la primera dosis y 14 mil con la segunda, según informó el vicedirector del Centro Nacional de Investigación en Epidemiología y Microbiología Gamaleya, quien además aseguró que se estima una respuesta inmune de hasta dos años después de aplicada.

Pero ni siquiera las cuestiones de salud pública son garantía contra los agoreros de siempre. Las desestimaciones, dudas y desconfianzas que los medios de comunicación masivos emiten casi al unísono contra la vacuna rusa, obedecen más a causas políticas que científicas, más aún si se tiene en cuenta que son epítetos que inmediatamente de pronunciados son continuados por loas a los desarrollos que se llevan en países de Europa central, con el objetivo de vapulear la confianza a la Sputnik V. Sin embargo, desestiman que si la Federación Rusa se encuentra a la vanguardia de la medicina mundial es por un largo historial de soberanía científica que se remonta a tiempos soviéticos, en el que se encuentran las célebres vacunas contra el cólera y la peste con éxitos históricos y contundentes. También la vacuna contra la viruela y el antídoto contra el Ébola, cuyos desarrollos sirvieron de base para generar la Sputnik, vieron la luz en ese país.

Por último, cabe destacar que hay otras vacunas aparte de la rusa con las que nuestro país también está tratando, que tampoco terminaron su fase de pruebas y que no serán producidas en masa hasta concluir los estudios satisfactoriamente, igual que en el caso ruso. Argentina estima contar con 750.000 dosis de las vacunas de Pfizer y BioNTech, que desarrollan los ensayos de su candidata en el Hospital Militar de CABA, con un 90 por ciento de eficacia, al igual que la rusa (92%). Además, a partir de marzo se podrá contar con la aplicación de la vacuna de Astra Zeneca y la Universidad de Oxford, que será de producción nacional para toda Latinoamérica.