CRISIS INDUSTRIAL

Avanzan las suspensiones y los despidos, también la lucha

Las expectativas de una recuperación en forma de V para el segundo semestre se desvanecieron y todavía no se puede hablar de que la economía haya tocado piso. La escalada del riesgo país y la presión sobre el mercado cambiario en las últimas semanas reflejan la creciente desconfianza de sectores que hasta ahora se encontraban a la espera de un cambio para bien. La producción industrial, que en marzo se había derrumbado un 21% (niveles similares a los de 2020 en plena pandemia) continuó cayendo en abril otro 9,8% y se espera otro tanto para mayo, ya acercándonos a los niveles desastrosos de 2001/02, en las vísperas del colapso de la convertibilidad. La inversión también se encuentra derrumbada a niveles cercanos a la pandemia. Los sectores manufactureros, la elaboración de minerales no metálicos, plásticos y metales básicos experimentaron las mayores caídas, pero también lo hicieron la construcción, la maquinaria y la industria automotriz. La agroindustria fue lo que menos cayó ya que se la compara con el año pasado, que tuvimos la peor sequía en 100 años. 

Según una encuesta de la UIA la situación financiera del sector industrial es tan mala que se les está haciendo difícil hacer frente a sus obligaciones, con el 35% de las empresas planteando que no pudieron completar el pago de sus impuestos y el 28% teniendo que patear hacia adelante el pago a proveedores. Todo lo contrario sucede en Brasil, en donde el gobierno de Lula continúa reforzando sus políticas de producción y atrae inversiones globales: pero con soberanía, sin necesidad de ningún régimen de entrega total como es el RIGI que quiere implementar Milei, ni reformas laborales antiobreras. Lo único que lograrían con una reforma laboral como la que plantean es llevar los salarios todavía más abajo, aumentando la inestabilidad laboral y sin que se incrementen las inversiones. Hoy, según la Universidad de Avellaneda, Argentina tiene el Salario Mínimo, Vital y Móvil más bajo de toda Latinoamérica en dólares -llegando apenas a 264 USD- y, al mismo tiempo, tiene los precios de la Canasta Básica más altos de toda la región, incluyendo productos básicos como la leche. Bajo la lógica neoliberal, las inversiones deberían estar lloviendo al tener costos de mano de obra tan bajos, sin embargo la tasa de inversión está por el piso, muchísima más baja que cualquier año que se analice del gobierno de Alberto Fernández (excepto el 2020 de la pandemia).

SUSPENSIONES Y DESPIDOS

Esta situación está llegando a un punto de no retorno y las empresas ya empiezan a acelerar suspensiones de personal y despidos. La misma encuesta de la UIA que nombramos antes revela que el 24% de las empresas industriales redujo su personal. Grandes empresas como Acindar, PepsiCo, General Motors y Fate, junto con las cadenas comerciales Jumbo, Changomás y Diarco, fueron afectadas por esta situación en el último mes. A esto se le agregan la preocupante cifra de 100.000 empleos en blanco perdidos durante el primer trimestre del año, según estimaciones del Centro de Economía Política Argentina (CEPA). Esto sin contar datos en negro y gran parte de la construcción, porque si no estaríamos hablando de cientos de miles de empleos más, destruidos en muy poco tiempo.

CONFLICTIVIDAD

Ante una crisis que se profundiza, también vemos los primeros conflictos en el sector. La UOM continúa en pie de lucha decidida a tomar medidas de fuerza si es que el monopolio Techint no se sienta a discutir un acuerdo de salarios que alcance a la inflación. La empresa ofrecía un “aumento” nominal pero que significaba una reducción del poder adquisitivo del 14,5%. De las 12 seccionales de la UOM, 9 rechazaron la propuesta y 3 la aceptaron, probablemente por presiones. Hoy las negociaciones siguen. La conflictividad también se sintió con fuerza en la ex planta de Johnson & Johnson, ahora Kenvue, en Pilar, en donde los trabajadores continúan protestando en la fábrica por el congelamiento salarial y las amenazas de despidos por parte de la empresa. En Changomas, que si bien su principal negocio no es industrial, los trabajadores realizaron protestas en varias plantas del conurbano pidiendo por la reincorporación de decenas de despedidos. Focos de protesta también se observaron en el sector del transporte y en la administración pública. Todavía son limitados pero sabemos que apenas son los primeros.

El gobierno de Milei sigue con su plan de convertir a nuestro país en una páramo atrasado, primarizado, fragmentado, desindustrializado y facilitando a los monopolios trasnacionales la apropiación de nuestros recursos naturales, limitando -o directamente anulando- la capacidad de regulación estatal. Ante esto, los recientes conflictos se irán multiplicando y masificando. Es necesario organizarlos políticamente, mantener el espíritu del lucha en donde sea necesario y ponerle un freno definitivo a la entrega de la Patria.

DERRUMBE INDUSTRIAL

• METALES BÁSICOS: El sector experimentó una contracción del 22,9% en abril y una disminución acumulada del 26% en el primer cuatrimestre del año. Todas las líneas de producción, incluyendo el Acero crudo, laminados terminados en caliente y laminados en frío, mostraron caídas interanuales en el cuarto mes del año.
• MINERALES NO METÁLICOS: Registraron una de las caídas más pronunciadas de todos los sectores manufactureros, con una disminución del 33,5% en abril y una contracción acumulada del 30,4% en los primeros cuatro meses del año. La producción de cemento Portland fue un 35,6% inferior en abril en comparación con el mismo mes del año pasado.
• MAQUINARIA Y EQUIPO: La producción disminuyó un 0,7% en abril en comparación con el mismo mes del año pasado y acumula una caída del 21,2% en los primeros cuatro meses del año.
• INDUSTRIA AUTOMOTRIZ: La producción del sector disminuyó un 21% en abril y un 22.6% en los últimos cuatro meses mientras que las ventas al exterior se desplomaron un 32.9% en abril y un 15.7% en los últimos cuatro meses. En cuanto a las ventas en el mercado interno, cayeron un 33.6% en abril y un 18% en el cuatrimestre, con una caída aún más pronunciada en los vehículos de producción nacional.
• ALIMENTOS, BEBIDAS Y TABACO: Fue uno de los sectores que menos cayó (un 0,1% en los últimos cuatro meses), aunque esto se explica por un repunte en ciertos alimentos y aceites respecto al año pasado, donde tuvimos la peor sequía en cien años. Si se tomara en cuenta el 2022 la caída sería similar al del resto de la industria.
• TEXTILES: El 79% de las empresas del sector disminuyeron su producción, siendo la caída de 37% en un segundo bimestre consecutivo de descenso.

SUSPENSIONES Y DESPIDOS

• CHANGOMAS: Se reportaron 150 despidos este mes, con perspectivas de alcanzar hasta 500 en el futuro cercano.
• ACINDAR: Suspendieron a 3,000 trabajadores metalúrgicos.
• GENERAL MOTORS: Está reduciendo su plantilla a través de retiros voluntarios y suspendió su producción por cuarta vez en el año, poniendo en riesgo unos 1,200 empleos.
• AKAPOL: Todos sus empleados han sido suspendidos por 60 días, afectando a 150 trabajadores de su planta de Pilar. La fabrica es líder en pegamento y adhesivos.
• FV: Se suspendió a 800 operarios en esta empresa líder en fabricación de grifería.
• PEPSICO: Se confirmó el despido de 36 empleados en su planta de Mar del Plata.
• TOYOTA Y RENAULT: Iniciaron procesos de retiros voluntarios para cientos de trabajadores con perspectivas de despidos masivos.
• FATE: Suspendió a 97 trabajadores del neumático.
• WHIRLPOOL: Se despidió a 60 empleados.