MOMENTO DE BALANCE

Otro año de lucha

El convite estuvo signado por el empuje de los más jóvenes y la experiencia de quienes supieron construir los primeros pilares de nuestro Partido. Entre las intervenciones realizadas en el brindis, se destacaron las palabras de los y las camaradas del Secretariado Nacional como así también de las direcciones intermedias. Momentos emotivos no faltaron, fundamentalmente al recordar a dos camaradas que partieron en los últimos meses y que dejaron una huella imborrable para el Partido, como lo fueron Rodolfo Módena y Raúl Romano. Tampoco quedaron exentas las lecturas políticas de coyuntura teniendo en cuenta que la actividad se realizó apenas dos días después de conocerse la condena mafiosa contra la compañera Cristina Kirchner.

En ese marco, el secretario general del Partido, Pablo Pereyra, puso en valor el peso estratégico que tiene la figura de Cristina para estos momentos: “la virulencia contra Cristina no nos sorprende, porque ella es la última barrera que tiene el imperialismo para volver a reinstalar el neoliberalismo y en cierta medida instalar el bipartidismo neoliberal, que es el objetivo del poder real para nuestro país. Esto es instalar un escenario político donde gane quien gane el modelo sigue siendo el que ellos designan, que sigamos siendo una colonia como fue hasta antes de Néstor y Cristina. Y saben que con Cristina no lo van a poder hacer. Por eso, o la van a querer volver a matar o la van a querer meter presa. Con Cristina viva y libre no lo pueden hacer”. En ese sentido, Pablo agregó que “hoy para tomar las medidas que hay que tomar en 2023, hay que tener una decisión revolucionaria, porque un revolucionario, un patriota solamente pone por delante un proyecto político, de Nación por sobre los intereses personales y por eso Cristina es la garantía, porque no va retroceder respecto al poder real”.

Por último, y apelando a la memoria de los camaradas que ya no están, Pablo sostuvo que “tenemos un Partido en el que tuvimos la suerte de ser formados y de militar con un montón de camaradas como Rodolfo que nos dejó hace poco, como Raúl que nos dejó hace menos y como tantos otros. A nosotros nos formaron ellos, no con el discurso solamente, sino con el ejemplo. Muchos compañeros que no eran de hablar, pero con su tarea mostraban una coherencia entre lo que se decía y lo que se hacía. Acá los militantes tenemos que tirar centros, tenemos que ir a cabecear, a veces tenemos que ir a picar piedras, muchas veces tenemos que cavar zanjas y pocas veces vemos las luces y estamos floreándonos porque no nos sentimos cómodos con eso. Nosotros buscamos el camino difícil. ¿Por qué? Porque la lucha de clases es difícil. Mirar para otro lado es fácil, la lucha de clases es difícil y por eso nosotros no bajamos los brazos y vamos a seguir luchando”.